Villarrín, candidata a convertirse en una de
las 17 "smart villages" de Europa
Más de 700
municipios rurales aspiran a recibir el apoyo de la UE para la aplicación de
las nuevas tecnologías en el desarrollo de la economía
Villarrín aspira a convertirse en una "Smart
Village" -aldea inteligente- y ser uno de los municipios escogidos por la
Comisión Europea para recibir el apoyo de la Dirección General de Agricultura y
Desarrollo Rural de Bruselas en la aplicación de las nuevas tecnologías para
fomentar el desarrollo de la zona.
Es un
concurso difícil, pues solamente serán 17 municipios rurales de toda
Europa, y hay más de 700 proyectos aspirantes. Un tercio de ellos
provienen de España, y llama la atención que entre las más de 200 candidaturas
españolas solo haya una de la provincia de Zamora.
Se trata
de un proyecto promovido por Patricia García Gómez, presidenta de la Asociación de
Coliving y Coworking de Castilla y León, para la organización de seminarios y
jornadas de formación para emprendedores en Villarrín de Campos con el objetivo de fomentar la creación de
nuevas empresas en el medio rural de Zamora que contribuyan, mediante el
autoempleo, a la fijación de población en los pueblos de la provincia, a la
dinamización de la economía en las zonas rurales y a la promoción de sus
recursos turísticos de Zamora.
La
candidatura cuenta con el apoyo y el aval del Ayuntamiento de Villarrín de Campos,
que preside Ainhoa
Aranguren Eloy, y del área de turismo de la Diputación Provincial de
Zamora. que dirige el diputado Jesús María Prada Saavedra.
Villarrín es por tanto la única candidata de Zamora a ser una de las 17
"Smart Villages" de Europa, y ya solo quedan 12 plazas, pues
la organización ya ha preseleccionado a cinco candidatas de Irlanda, Chequia,
Finlandia, Grecia y Francia.
Estos cinco pueblos trabajarán hasta
2021 con el apoyo de la Comsión Europea en el desarrollo de sus respectivos
proyectos tecnológicos y sociales, y pronto se incorporarán otros 12 municipios
europeos.
Entre los
proyectos preseleccionados está el de la isla griega de Citera, entre el Egeo y
el Mediterráneo, que quiere introducir las nuevas tecnologías en la producción
de aceite de oliva, miel y hierbas aromáticas, así como
en la creación de ofertas de turismo de calidad. Su objetivo último es la
creación de oportunidades para que los jóvenes del lugar puedan trabajar y
quedarse a vivir en la isla.
En el caso
de la República Checa, la seleccionada es Mokarov, un
municipio-dormitorio a 35 kilómetros de Praga que quiere profundizar
en el e-gobierno (gobierno electrónico), o sea, en la tramitación telemática de
todos los asuntos municipales para facilitar la vida de la mayoría de sus
ciudadanos.
Raudanmaa
es una extensa área de Finlandia con una población muy dispersa que apenas
supera los 600 habitantes. Han construido su propio sistema de abastecimiento
de agua potable y su propia red de fibra óptica, y ahora
quieren construir un espacio multifuncional donde organizar eventos y ofrecer
servicios a su población.
El pueblo
francés de Mouans-Sartoux, cerca de Francia, lleva a cabo desde 40 años
un proyecto para que los agricultores locales provean de verduras a los
comedores escolares del municipio para educar a los alumnos en un
estilo de vida saludable. Ahora necesitan la aplicación de las nuevas
tecnologías para lograr una producción más eficiente y atraer a nuevos
cultivadores.